¿Cómo es alojarte en un hotel todo incluido? Esta es la experiencia

Si quieres vivir la experiencia de estar en Cancún y llegar a un hotel todo incluido, lugar que es básicamente un universo pequeño donde lo único que tienes que hacer es relajarte, y eso lo logras desde el momento en el que cruzas la recepción porque la sensación de ‘no tengo que preocuparme’ comienza a instalarse’.

El check-in es rápido, el personal es amable y el coctel de bienvenida marca el comienzo de las vacaciones sin estrés, porque cuando abres la puerta del cuarto, el aire acondicionado te abraza y la cama gigante parece que te dará el mejor descanso del mundo, y afuera el mar brilla y te garantiza que no tendrás que pensar en nada más que disfrutar porque todo viene incluido.

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Todo Incluido: Desayuno sin prisa

¿Cómo es alojarte en un hotel todo incluido? Esta es la experiencia

Al despertar en un resort todo incluido, vas a notar que todo cuenta con su propio ritmo porque no necesitas correr ni planear demasiado, solo tienes que bajar al restaurante y elegir entre frutas tropicales, chilaquiles, omelette recién hechos o pan dulce, porque todo está disponible y puedes repetir lo que quieras sin sentir culpa.

Al desayunar, el personal te da información acerca de las actividades del día como lo son las clases de yoga frente al mar, los paseos en kayak, espectáculos nocturnos o degustaciones de tequila, así que la sensación de libertad en este lugar es total y tú decides cuánto o que tanto puedes hacer.

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Tardes de ensueño en la playa

¿Cómo es alojarte en un hotel todo incluido? Esta es la experiencia

Al estar en la alberca, los bartenders te prepararán cocteles coloridos in necesidad de preocuparte por la cuenta, y en la playa, los camastros y sombrillas esperan para que te relajes escuchando las olas, y algunos hoteles te dan incluso snorkel, paddle board o catamarán, todo incluido en la tarifa.

El servicio es constante, pero no es invasivo, porque alguien te ofrece snacks, toallas limpias e incluso un nuevo trago, y es fácil de entender por qué tanta gente elige esta clase de alojamientos porque todo fluye y está pensado para que no te falte absolutamente nada.

Y en las noches, cuando el sol cae, estos lugares se transforman, la iluminación se convierte en algo cálido, los restaurantes temáticos abren y pueden elegir entre cocina italiana, japonesa, mexicana o gourmet y luego hay música en vivo, shows y si quieres fiesta hasta la madrugada.

Alojarse en un hotel todo incluido es una experiencia de desconexión total. No se trata solo de comer o beber sin límite, sino de entregarte al descanso, dejarte consentir y sentir que, por unos días, el mundo exterior no existe. Es la versión más cómoda y placentera de las vacaciones: el lujo de no tener que pensar en nada más que disfrutar.

Recuerda que para poder llegar a estos lugares sin ningún problema con Traslados Cancún, servicio que te dejará en la puerta de estos resorts para que goces de sus amenidades sin ningún problema.

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